Hola a todo el mundo!
Se acercan las fiestas navideñas, y necesitamos ideas para preparar platos originales y sabrosos para nuestros comensales.
Mi marido me ha dicho que tiene ganas de probar de hacer recetas japonesas, así que os esperan una racha de cocina japonesa. Ayer probamos de hacer el pollo con salsa teriyaki, 100% casero.
Aunque salió muy rico, no hemos conseguido el sabor de la salsa auténtica, al menos de los restaurantes donde la hemos podido probar.
Ingredientes:
- 350 gr de arroz
- 1/2 kg de pollo deshuesado
- 2 dientes de ajo
- un poco de jengibre
- 8 gr de maizena (harina de maíz)
- 15 ml de vinagre de arroz
- 50 ml de salsa de soja
- 120 ml de agua
- 30 gr de azúcar moreno
- 1 cc de aceite de sésamo
- 1 cs de aceite de girasol


Preparación:
Empezaremos con preparar el arroz de acompañamiento. Primero lo lavaremos para quitarle el almidón, y lo pondremos a cocer. Después, prepararemos la salsa.

Picaremos los ajos, los pondremos en un mortero junto con un poquito de jengibre. Lo picamos bien.



Luego, en un cazo, pondremos el picado junto con una cucharadita de aceite de sésamo y una cucharada sopera de aceite de girasol.



Lo sofreímos un pelín de nada, y enseguida le echamos el agua, la salsa de soja y el azúcar moreno.



Una vez se haya disuelto el azúcar, para espesar nuestra salsa Teriyaki le añadiremos la harina de maíz. Pero antes, deberemos diluirla primero con un poco de agua. Cuando la tengamos líquida, la iremos echando poco a poco mientras removemos. Veréis qué rápido espesa.


Ahora prepararemos la carne. Primero sellaremos el pollo, pero tiene su ritual concreto: el primer paso es poner el pollo por la parte de la piel en la sartén y SIN ACEITE. Mientras se va dorando, veréis que va soltando grasa. Es importante retirarla.



Cuando ya esté doradita la piel, hacemos el pollo por el otro lado.

Una vez lo hayamos dorado por los dos lados (no hecho del todo, cuidado) lo retiramos del fuego, y lo cortamos a tiras.

Ahora volvemos a echar el pollo en la sartén, y le incorporamos la salsa teriyaki. Lo dejamos que se termine de hacer el pollo y ya estará listo para comer. Sólo tendremos que esperar al arroz! 🙂




A parte del arroz, lo hemos acompañado con un poco de brotes de alfalfa, anacardos y semillas de sésamo. Estaba muy rico, pero como ya os he comentado al principio del post, no es un sabor auténtico de salsa teriyaki. Tendremos que preparar una versión 2.0.
Que aproveche!