Buenas gente!
Como llevábamos días sin publicar nada dulce, el sábado estuvimos buscando alguna idea por Internet. Yo me acordé de un dulce típico americano, los famosos rollos de canela (cinnamon rolls) así que ayer decidimos el probarlos de hacer.
La verdad es que es algo que lleva rato prepararlo, con cariño, paz y tranquilidad. También es necesario disponer de un espacio amplio, ya que hay que amasar, y también de hilo para luego hacer los cortes.
Ingredientes:
- 250 ml de leche
- 7 gr de levadura seca de panadería
- 55 gr de azúcar
- 1 huevo
- 55 gr de mantequilla
- 1 pizca de sal
- 1 cucharada sopera de vainilla
- 375 gr de harina
Para el relleno:
- Mantequilla
- Azúcar moreno
- Canela en polvo
Para el glaseado:
- 1 cucharada sopera de mantequilla
- 150 gr de azúcar glas
- 1 cc de vainilla
- Agua
Preparación:
Primero de todo, prepararemos la levadura. Calentaremos un poquito la leche, sin que esté excesivamente caliente, y le añadiremos una cucharada sopera de azúcar y la levadura de panadería. La dejaremos actuar unos 10 minutos aproximadamente. Veréis que cuando esté preparada, tendrá burbujas.




Una vez tengamos lista la levadura, mezclaremos los ingredientes para la masa. En un bol grande, echaremos la harina, le pondremos una pizca de sal, un huevo y la mantequilla, previamente derretida. Por último, le incorporaremos la levadura y lo mezclaremos todo muy bien. Para darle gusto y aroma, nosotros le hemos añadido una cucharada sopera de vainilla.





Ahora es momento de amasar. Si veis que la masa os pide un poco más de harina, pues se la ponéis poco a poco mientras vais amasando. Pero sin pasarse, es muy importante que la masa quede un poco pegajosa.

Una vez hayamos terminado de amasar, la pondremos en un bol engrasado con mantequilla, y la taparemos con film de plástico. Dejaremos reposar hasta que doble su volumen.


El siguiente paso será darle un amasado para quitarle el aire, y a continuación, la extenderemos con un rodillo en forma rectangular. Luego lo embadurnaremos con mantequilla, azúcar moreno y canela.



Nosotros hicimos una pasta con la mantequilla, el azúcar moreno y la canela, y luego con un pincel pintamos la masa. Pero también podéis hacerlo por separado. Primero lo pintáis con la mantequilla, y a continuación espolvoreáis con azúcar moreno y la canela.




Una vez tengamos esto, ya sólo nos queda enrollar.



Ahora, con la ayuda de un hilo, haremos los cortes. Lo hacemos de este modo para que no se nos deforme. La manera de hacerlo es rodear con el hilo, cruzar y estirar. Así lo que conseguimos es cortar de fuera hacia adentro, y se queda un corte bonito 🙂




Colocaremos nuestros rollos en una bandeja, y los dejaremos levar una media hora más o menos. Y luego los pondremos al horno durante 40 minutos a 150-160 ºC, previamente precalentado.


Mientras vamos preparando el glaseado. En un bol ponemos mantequilla derretida, con azúcar y agua. Nos tiene que quedar una textura tipo salsa cremosa.


El agua hay que ir poniéndolo poco a poco. Tiene que quedar una textura tipo salsa cremosa, para luego hacer hilos sobre los rollos. Le hemos añadido vainilla para darle un toque más aromático.

Cuando salgan los rollos del horno, los rociaremos con nuestro super glaseado. Y a disfrutar!



¡Que aproveche!